Con una estrategia basada en el diseño, podemos ayudar a definir: quien eres y que te diferencia; acotar tus mercados; evaluar tu actual posicionamiento. En muchas ocasiones, ajustes en el diseño de tu marca y el posterior refresh en redes sociales, puede potenciar tu camino hacia el éxito.
Varios factores se interrelacionan para formarnos como una marca o personalidad distinguida. Para que un proyecto comunicacional se haga realidad, primero deberá tener una alta carga de deseo personal que nos impulse a pensarlo y nos guíe hacia el largo proceso donde se traza una estrategia que lo materialice.
En cualquier estrategia, el diseño es para nosotros una parte indispensable que guía el proceso comunicacional y determina en gran medida como queremos presentarnos frente a los demás. Nuestra marca personal, “es una combinación de atributos, transmitidos a través de un nombre, que influencia el pensamiento de un público determinado y crea valor” (Vicent Grimaldi, consultor especializado en Brandign & Finanzas). Por ello, en el 007 del marketing, tenemos siempre presente que nuestra imagen será la representación mental que los demás tengan de nosotros. De allí surge la importancia de identificarnos con los diseños que transmitan exactamente la imagen que deseamos.
En el fondo, las formas de comunicación son simples, sobre todo en entornos digitales donde no hay demasiado tiempo para captar nuestros seguidores. Cuando hablamos de diseño como clave del éxito, nos referimos a transmitir nuestro mensaje de forma clara, directa, concisa y potente desde parámetros estéticos (cimentados en las sociedades actuales) que nos sitúan en un grupo de pertenencia o en otro. Nuestra marca debe componer en el imaginario de quienes nos miran; imágenes y aspectos positivos que nos asocien a ciertas características.
Estos parámetros son puramente visuales, nos referimos a los colores, la composición de elementos y los modos de escritura como transmisores de una información, que suele ser recibida de forma inconsciente y quienes nos miran, la tienen en cuenta. Por ejemplo, la presencia profesional y aspecto físico hablan mucho de nuestro éxito: que ropas vestimos y en que contexto, transmiten un símbolo de pertenencia a un grupo social o estatus determinado.
El diseño es importante tanto en entornos presenciales como digitales y si lo relacionas con energías y entornos positivos ya tienes andado una parte del camino que conduce a “estar donde quieres estar”. Si junto a ello, tienes suficiente visibilidad, audiencia, un posicionamiento correcto y una buena reputación, lo demás, ya llegará.
¡Y no lo olvides! la coherencia en el diseño otorga credibilidad.
Analía Fraser
Publicado en: El 007 del marketing
Marzo 2018